para qué sirve, propiedades curativas, cómo prepararla y advertencias

para qué sirve, propiedades curativas, cómo prepararla y advertencias

Uno de los cítricos más importantes en la dieta humana es la naranja, que aporta vitamina C al cuerpo. Más allá de su fruto, la hoja de naranja contiene compuestos activos que pueden contribuir a la salud.

Esta hoja posee propiedades sedantes, antiespasmódicas y antiinflamatorias, derivadas de compuestos como los flavonoides. Estos fortalecen el sistema inmunológico y calman el sistema nervioso, según detalla el portal de medicina natural Healthline.

Además de tener alto contenido de vitamina C, esta hoja contiene vitamina K, esencial para fortalecer los huesos y evitar la coagulación excesiva de la sangre, detalla Arlene Carrera, coordinadora del Departamento de Nutrición Clínica y Dietética del Hospital Roosevelt.

Estas vitaminas también apoyan la salud ósea, ya que mejoran la absorción de calcio y su disposición en los huesos. Asimismo, la hoja de naranja contiene antioxidantes potentes que ayudan a combatir los radicales libres y fortalecen el sistema inmunológico, destaca Carrera.

Otro de los beneficios de la hoja de naranja es su capacidad de inducir un estado de relajación que contribuye a combatir el insomnio y la ansiedad.

La hoja de naranja ayuda a prevenir enfermedades

Carrera destaca que se debe comprender que la hoja de naranja no es un superalimento que cure enfermedades, pero sí contribuye a la prevención de padecimientos digestivos.

“Cada grupo etario tiene distintos requerimientos de vitamina K y C, y aunque la hoja de naranja no se considera un fármaco, puede reforzar funciones esenciales del cuerpo, especialmente cuando hay enfermedades que aumentan esas necesidades”, señala la experta.

Para su consumo, lo más recomendable es consultar con un especialista, principalmente si se padece una enfermedad crónica o se busca prevenirla.

Consumo de la hoja de naranja

Aunque su consumo está asociado a beneficios antiinflamatorios y antiespasmódicos que ayudan a relajar el cuerpo, su preparación más común es en forma de té o infusión. No obstante, también puede utilizarse en otras preparaciones, según Carrera.

“Puede usarse en ensaladas, postres, jugos o té, que es lo más sencillo. Obviamente, siempre hay que mantener las medidas de higiene, lavar bien los alimentos y cocinarlos adecuadamente”, destaca.

Advertencias y preparación

Dentro de las contraindicaciones, no se recomienda consumir en exceso la hoja de té en personas con problemas de coagulación, debido a que un exceso de vitamina K puede resultar contraproducente. Por ello, se aconseja consultar a un especialista.

Los nutricionistas explican que esta hoja puede utilizarse en diversas comidas, siendo el té una de las formas más comunes.

Para prepararlo, se deben hervir de cinco a 10 hojas de naranja durante al menos cinco minutos, para obtener dos tazas de té.

Este puede consumirse a diario sin inconvenientes, siempre que no existan condiciones médicas específicas, destaca Carrera. Puede combinarse con manzana natural y tilo, o secarse y usarse molida como especia en postres o ensaladas.

También puede aprovecharse la fruta de la naranja, consumiéndola con pepita, limón y sal, añadió la nutricionista.

En compresas, esta hoja ayuda a aliviar el dolor de cabeza y dolores menstruales. (Foto Prensa Libre: Freepik)

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