La tensión entre libertad de expresión y campaña anticipada
Políticos y excandidatos guatemaltecos han levantado la voz para exigir al TSE reglas claras que distingan entre la libertad de expresión y la campaña anticipada, con el fin de prevenir la creciente autocensura que se observa entre aspirantes políticos. Señalan que sin criterios precisos, hasta un comentario en redes podría invalidar una candidatura según el artículo 94 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
Impacto en candidatos nuevos y veteranía política
La restricción actual de la Lepp, vigente desde 2016, ha generado un desbalance que beneficia a políticos ya posicionados. Expertos, como Francisco Quezada del Cien, advierten que los nuevos aspirantes enfrentan desventajas importantes al no poder expresarse sin correr el riesgo de sanciones. La exigencia es que el TSE y el Congreso definan con precisión cómo distinguir entre emitir una opinión y hacer campaña anticipada, para que los ciudadanos puedan participar libremente sin temor a represalias .
Presiones para reformas y precedente 2023
A raíz de la experiencia electoral del 2023, donde el TSE inició 70 investigaciones por promoción anticipada y rechazó candidaturas como la de Roberto Arzú, se intensificó el reclamo por reglas claras. La mesa de diálogo convocada para el 9 de junio buscaba revisar estas normas, pero aún no se ha logrado acuerdo para fijar criterios interpretativos estables antes del acto electoral del 2027.
Criterios marcados desde la institucionalidad electoral
Según Pablo Portocarrero del TSE, se respetan las expresiones ideológicas y críticas, mientras no incluyan llamados al voto o promesas propias de campaña. Sin embargo, políticos como Sandra Torres y Roberto Arzú insisten en que los reglamentos actuales son ambiguos y pueden ser aplicados de manera arbitraria, generando autocensura preventiva.
